El campo nunca para, hay que tener cuidado y hacer las cosas bien y a su tiempo, pues si no, cuando menos te lo esperas ha llegado la primavera y te come el tiempo.

Tras las heladas y las nieves ya estamos abonando la tierra, para que tenga el alimento necesario cuando las plantas crezcan y le pidan sustancia para dar los frutos. Es cuando todavía no ha terminado el invierno y espera un período amplio con lluvias cuando se abona la tierra, de manera que vaya descomponiéndose y calando su jugo, esponjándola.

Por la foto podéis ver que ya la tierra promete buena cosecha: tierra amable y generosa de San Clemente. Después…Dios dirá, que el tiempo es caprichoso y los avatares muchos. Pero nosotros ya estamos al pie del cañón, al 100% de trabajo, para que en unos meses podáis disfrutar de las mejores patatas.

Nosotros lo hacemos con el estiércol proveniente de la ganadería Los Patiños (os invitamos a probar sus Quesos Fuente Lázaro). Una familia ganadera de Santa María del Campo Rus, que como nosotros llevan generaciones de trabajo abnegado y honesto con sus animales.

Ahora lo llaman #economíacircular, pero nos da a nosotros que esto no es más que volver a lo que hacían nuestros bisabuelos, y nuestros abuelos y nuestros padres y nosotros: colaborar entre vecinos y aprovechar todo lo que se pueda (aquí nada se tira).

Y espero que también Martín, que ya acompaña y aprende. Pues si de algo sabemos los del campo, es de #economía.